
CUMANÁ.- Las oficinas de la Compañía Anónima de Administración y Fomento Eléctrico (Cadafe) en los estados nor-orientales del país se quedaron sin vigilancia privada desde hace dos semanas, debido a una huelga que iniciaron los centinelas pertenecientes a la empresa Guardianes Triple R, por supuestas deudas salariales.
Por ser Cadafe una de las instituciones públicas de primordial importancia estratégica nacional, se activó un plan de seguridad con el apoyo de la Guardia Nacional (GN) y la policía estadal y las municipales de la entidad.
En Cumaná, ocho efectivos de la GN custodian la sede principal de Cadafe región uno, ubicada en la avenida Universidad, al lado de la Alcaldía de Sucre.
También 12 uniformados de la brigada motorizada de la policía regional y la municipal “hacen rondas” a esta edificación.
En las Oficinas de Atención al Cliente (OAC) de las calles Cancamure y Petión hay un vigilante en cada una de ellas, por lo que la seguridad es reforzada con brigadas policiales, en cambio la OAC de la calle Montes estuvo cerrada en la mañana de ayer por falta de custodios, pero a partir del mediodía se reiniciaron las actividades.
Niovys Rondón, gerente regional de Cadafe, reiteró a los usuarios que pueden acudir tranquilamente a cualquiera de las oficinas a cancelar las facturas y hacer cualquier diligencia, porque en todas ellas se garantiza su seguridad.
De todos modos, en caso de que algún recinto se encuentre cerrado, los usuarios pueden pagar sus recibos en cualquier oficina de atención.“En el estado Anzoátegui el conflicto de los vigilantes es menor, por lo que allá varios de ellos están trabajando normalmente”, explicó Rondón.
Trascendió por una fuente vinculada a Cadafe que, al parecer, los centinelas en conflicto están divididos en dos bandos: los que respaldan la huelga y los que no. Por este motivo, en algunas OAC hay por lo menos un custodio.
El Tiempo trató de contactar a Arévalo Gutiérrez, presidente del Sindicato de Vigilantes Privados de la región nor-oriental, pero fue imposible localizarlo.
No obstante, Jesús Guanare, gerente de Guardianes Triple R, señaló que se logró un acuerdo con el sindicato en una reunión que sostuvieron ayer en Barcelona (Anzoátegui).
Se concretó la cancelación inicial de dos quincenas y un mes de cesta tickets el próximo martes, y que en la medida que Cadafe vaya cancelando la deuda que tiene con Guardianes Triple R por sus servicios, se irá pagando al personal. Se espera que hoy los vigilantes se reincorporen a sus puestos de trabajo, poniendo punto y final al conflicto.
389 vigilantes de la empresa Guardianes Triple R están en huelga desde el pasado sábado 15 de agosto. Según Arévalo Gutiérrez, presidente del Sindicato de Vigilantes Privados de la región nor-oriental, la compañía les adeuda tres quincenas, seis meses de cesta tickets y 49 vacaciones vencidas, entre otros pasivos.
799,5bolívares fuertes mensuales es el sueldo que ganan estos centinelas, es decir, el salario mínimo de 2008.
Arévalo Gutiérrez afirmó que Guardianes Triple R les debita por Ley de Política Habitacional, pero no aparecen registrados.